Un corazón es el deseo de Sofía: Una niña de tres años de edad, de nombre Sofía Abigail Insfrán Galeano necesita de un corazón, ahora mismo la menor se encuentra internada en el Hospital Pediátrico de Acosta Ñu y fue diagnosticada de hipertrofia y también de insuficiencia mitral.
Los padres de la pequeña, Lourdes Galeano y Abilio Insfrán Fleitas se encuentran bastante preocupados por el estado de su hija y confían en la solidaridad y comprensión de toda la ciudadanía. El donante debe de pesar por lo menos 30 kilos, cualquier información pueden contactar al 0994 206 803 o 0985 831 781.
Según comento su mamá, la niña nunca manifestó ninguna enfermedad, solamente contaba con gripe y dolor de garganta como cualquier criatura, además comentó que hace dos meses fue cuando comenzó a hincharse, con analgésicos fue que empezó a mejorar.
Aunque posterior a eso, su mamá comentó que volvió a sufrir la hinchazón, le realizaron una ecografía del abdomen y el médico que realizó el estudio mencionó que veía algo raro en la menor de edad. Posterior a eso, fueron hasta el Hospital Nacional de Itaugua y ahí le dijeron que podría ser un problema renal.
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El 30 de setiembre, posterior a varios estudios que le realizaron a Sofía, notificaron a los padres que la menor de edad sufría de insuficiencia cardiaca, según comentó la madre de la pequeña niña de tan solo tres años de edad.
La familia de Sofía Insfrán Galeano es del departamento de Cordillera, específicamente de la ciudad de Loma Grande, hace 22 días se encuentra de manera urgente en el Hospital de Acosta Ñu, donde se haya en terapia intermedia siendo monitoreada constantemente por su doctora Leticia.
La madre recalcó que su hija necesita un trasplante de corazón, por culpa de una bacteria que probablemente se inició con el dolor de garganta, que fue el punto en el que comenzó a empeorar la niña.
Sofía es una chica muy inteligente y muy educada, siempre mantiene un buen comportamiento y nunca le gusta pelear, ella cuando suele jugar y se enoja, simplemente se da la vuelta y regresa a su casa, y en el hospital, ella cuenta cada gotita de sangre que le sacan y espera de manera ansiosa su nuevo corazón, según mencionó su madre.
