Salió de garante a su amigo y este lo dejo con una gran cuenta: Lección costosa, la garantía amistosa que se convirtió en una pesadilla financiera
El impacto de una decisión impulsiva
Un hombre joven de 21 años descubrió de la manera más difícil que fungir como aval para un amigo puede tener consecuencias financieras catastróficas. En un acto de generosidad, este individuo asumió el papel de garante para su amigo argentino, una decisión que lo dejó con una deuda que supera los G. 4 millones, según detalló en Twitter.
En junio del año anterior, Saul L., residente en Lambaré, se sintió conmovido por su amigo rugbista, identificado con las iniciales J. C., quien estaba necesitado de un nuevo teléfono móvil. Saul intervino, facilitando a su amigo un plan de pagos para un celular en una conocida tienda de electrodomésticos, lugar donde trabajaba.
“Fui su respaldo financiero porque no se le aprobaba crédito en ningún otro lugar. El primer garante que presentó fue rechazado, así que decidí intervenir, pensando que su sueldo de G. 3.500.000 sería suficiente para manejar los pagos”, comentó a EXTRA. Sin embargo, esta suposición fue incorrecta.
Un incumplimiento que provoca un efecto dominó
La deuda contraída fue por un iPhone, que debía ser pagado en 6 cuotas de G. 1.500.000. Las primeras 4 cuotas fueron pagadas sin contratiempos, pero en el quinto mes, su amigo desapareció.
“En noviembre y diciembre, me llegaron avisos de que era yo quien debía cubrir la deuda. Le escribí varias veces sin obtener respuesta. Finalmente, hace unas semanas, me contactó para informarme que había viajado a otro país debido a una lesión en el hombro, y desde entonces, no he sabido nada de él”, relató Saúl.
Recurriendo a medidas desesperadas
Para cubrir la deuda, Saúl tuvo que recurrir a su aguinaldo y, además, se vio obligado a solicitar otro préstamo para saldar la deuda ajena. Con un toque de humor amargo, admitió: “Ahora aprendí a no ser tan ingenuo”.
Edwar Arca, director del Centro de Atención al Deudor (CENADE), mencionó que este tipo de situaciones son bastante comunes y afectan más frecuentemente a amigos, familiares y compañeros de trabajo.
Cautela y sabiduría ante los compromisos financieros
“A menudo, el titular de la deuda se retrasa en los pagos, no por mala fe, sino debido a imprevistos, como la pérdida del trabajo o de una fuente de ingresos. Este fenómeno se acentuó durante y después de la pandemia”, señaló Arca.
Como consejo, Arca instó a las personas a leer cuidadosamente antes de firmar cualquier tipo de documento financiero. Al firmar, se asume la responsabilidad de la deuda, en caso de que el titular no pague.
Aunque un garante puede emprender acciones legales para recuperar su dinero, las probabilidades de éxito son escasas, dado que el deudor.
Fuente: https://www.extra.com.py/salio-de-garante-a-su-amigo-para-sacar-un-celu-y-le-dejo-con-feroz-cuenta
▶️ Índice: