Como cada arranque del fin de semana, un grupo de amigos se prestaban a jugar el futbolacho. Lo que no sabían es que esas reuniones que, habitualmente, solían ser escenario de risas y anécdotas terminarían en un hospital llorando la temprana partida de un amigo de todos.
El hombre recibió un certero pelotazo que le terminó provocando la muerte
El encuentro se disputaba de manera intensa, como cualquier chute por más “rei” que sea. En una de esas, uno de los jugadores sacó un taponazo. La pelota pegó de lleno en el estómago de un hombre de unos 47 años. El mismo al toque acusó el fuerte impacto y tras una breve queja rápidamente se desvaneció.
No había ambulancia cerca ni tampoco paramédicos. La gente que se encontraba en el lugar no tardó en reaccionar al ver que perdió el conocimiento y a toda bala lo llevaron a un hospital cercano. Al llegar, la peor noticia: los médicos confirmaron su fallecimiento por un paro cardiorrespiratorio.
Los testigos precisaron que el pelotazo en la panza lo hizo desvanecerse en la cancha y que fueron sus compañeros quienes lo trasladaron al hospital local, aún con signos vitales.
Fuente: Diario Cronica