En Edelira, Itapúa, una familia está pasando por un infierno. Tienen que vender todo lo que tienen para pagar el tratamiento de leucemia de su hija de 17 años. La chica está en el Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS), luchando por su vida, y ahora sus padres están haciendo lo inimaginable: poniendo su casa en venta.
La joven, Mirian Lujan Anahí Maidana Fretes, fue diagnosticada con leucemia linfoblástica aguda que se ha desperado en ella después de enfermarse de covid-19 en 2021. Ahora, la familia ha lanzado un grito de ayuda en redes sociales, anunciando que están vendiendo todo en oferta para cubrir los costos del tratamiento.
“Ni vendiendo hasta la última zapatilla nos alcanza, pero tenemos que intentarlo,” dijo Ramón Maidana, el padre de Mirian, visiblemente angustiado. La medicina que Mirian necesita no se encuentra en Paraguay y su importación es un dolor de cabeza por el costo astronómico.
El medicamento en cuestión es el Inotuzumab, una droga recomendada para casos como el de Mirian, donde la leucemia no responde a tratamientos convencionales. Según Pfizer, este tratamiento es específico para ciertos tipos de leucemia y Mirian necesita siete ampollas que rondan los $100 mil dólares.
“Estamos haciendo quimioterapia para ganar tiempo, pero ella no puede esperar más,” comentó Ramón, mientras su esposa Mirian Fretes asentía, ambos exhaustos por la situación.
Buscando Justicia para Conseguir el Medicamento
La familia no se ha quedado de brazos cruzados. Han presentado un amparo judicial en el Ministerio Público de Itapúa para presionar al Ministerio de Salud para que compre el medicamento. “Ya hablamos con los padres de Mirian, pero falta un empujón de un juez,” dijo Ramón desde el hospital.
Mirian, que debería estar en su tercer año de secundaria, ha tenido que dejar la escuela. Lleva meses entre tratamientos y visitas al hospital, y su familia, ambos docentes en Edelira, están haciendo malabares para cuidar también a su otro hijo de 10 años.
La situación es crítica. La comunidad está respondiendo, pero el reloj no se detiene. La familia Maidana Fretes está en una carrera contra el tiempo, vendiendo su vida pieza por pieza, esperando un milagro. ¿Llegará a tiempo la ayuda que necesitan? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es clara: el sistema que debería protegerlos, los tiene en jaque, luchando solos contra una enfermedad y una burocracia que no da tregua.
¿Y ahora, qué?
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Mientras Ramón y Mirian miran con esperanza cada llamada y cada visita, la pregunta sigue en el aire: ¿Se agilizará el proceso judicial? ¿Llegará el medicamento a tiempo? En un mundo donde la salud debería ser un derecho, la familia Maidana Fretes está en una batalla donde cada segundo cuenta y cada venta es un paso más hacia la esperanza de salvar a su hija.
