Mino una perrita que no abandona la tumba de su dueño: Desde hace tres años una perrita llamada Mino se encuentra pegada a la tumba de su dueño, quien era un niño de dos años que falleció ahogado en una acequia cerca de su casa en Vietnam.
Mino es una perrita de pelaje negro, aunque se puede apreciar en la parte trasera del lomo un tono de marrón descolorido, la familia de la mascota manifiesta que esto se debe por las largas horas que pasa bajo el sol y la lluvia, siempre sobre la tumba del niño fallecido en la Provincia de Long An, en el delta del río Mekong.
La abuela del pequeño, Nguyen Thi Ut, comentó a EFE que tres días después del entierro, que se celebró en el patio trasero de la casa, Mino se instaló sobre el sepulcro y desde entonces no existe forma de que lo abandone.
Mino una perrita que no abandona la tumba de su dueño, los Familiares del niño intentaron que el perro ya no vaya a la tumba
La señora manifiesta que intentó que dejara de ir hasta el lugar porque no consideraba que sea bueno, aunque la perrita de igual forma volvía hasta la tumba de su dueño.
La perrita llegó a la familia cuando era un cachorro, en ese entonces el pequeño Khet tenía solamente dos años de edad, y rápidamente los dos se hicieron buenos amigos, en vista que jugaban juntos todos los días mientras sus padres trabajaban y los abuelos se ocupaban de la casa.
Esta amistad terminó trágicamente debido al fallecimiento del pequeño, esto ocurrió cuando su madre estaba cocinando y el niño se escapó de la casa, cruzó el camino que separaba su domicilio con el canal aledaño y cayó al agua sin que nadie pudiera salvarlo.
Después de este trágico suceso lo sepultaron en la parte trasera de la casa, tal como es costumbre en el campo vietnamita. A los tres días que transcurrieron del entierro, Mino se instaló sobre la lápida y, desde entonces, es el lugar donde pasa la mayor parte del tiempo.
No abandona la lapida del niño hasta que se ponga el sol
Mino es una perrita muy amable, siempre que llegan las visitas se dirige a saludarlas, se queda unos minutos recostada en la entrada de la vivienda y, al cabo de unos minutos, nuevamente vuelve a la lápida, lugar que no abandona hasta que se ponga el sol.
La abuela del niño manifiesta que Mino ingresa a la casa unas horas al mediodía y después vuelve a dirigirse a la lápida, aunque haya mucho sol o llueva, inclusive suele pasar toda la noche allí.
Por su parte, el padre de la criatura, Nguyen Thanh Go, mencionó que en algunas ocasiones Mino agarra alguna fruta o algo de comida y lo deja al costado de la tumba.
Mino jamás llegó a tener una relación tan cercana con ninguno de los otros niños
Mientras la abuela habla, la hermana del niño fallecido juega por la casa y el padre cuida al niño de 11 meses, que nació dos años después de la tragedia.
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Mino es muy cariñosa con ellos, aunque la abuela manifiesta que jamás llegó a tener una relación tan cercana con ninguno de sus nietos de la misma forma que tenía con Khet.
En vista que Mino pasaba mucho tiempo bajo el sol y la lluvia, un amigo de la familia le regaló un cobertizo para que se resguarde, pero rápidamente lo sacaron en vista que un pariente reclama la propiedad del terreno.
Debido a sus exigencias, la familia planea realizar una ceremonia para acercar la tumba a unos metros de la casa. Para finalizar, la abuela del niño menciona que no tiene dudas de que Mino de igual forma continuará pasando el día allí
