En un caso que ha conmocionado a la comunidad de Yby Pytã, en el departamento de Canindeyú, Paraguay, una madre fue arrestada bajo sospecha de explotar a su hija de 13 años. La detención se produjo tras una denuncia vecinal que alertó a las autoridades sobre una situación alarmante que involucra a una menor de edad.
Según las primeras investigaciones, la madre habría presuntamente entregado a su hija a un hombre de avanzada edad a cambio de un teléfono móvil. La Fiscalía y la Consejería Municipal por los Derechos del Niño, Niña y Adolescente (Codeni) han intervenido en el caso, que ha despertado preocupación por la seguridad y el bienestar de los menores en la región.
Detalles del caso
La adolescente, cuya identidad se mantiene en reserva por su condición de menor, logró escapar de la situación y proporcionó su testimonio a las autoridades. En su declaración, la joven afirmó que fue obligada por su progenitora a acompañar al hombre en contra de su voluntad.
«Me negué a ir, pero mi madre me obligó», habría manifestado la menor ante los investigadores, según fuentes cercanas al caso.
Antecedentes familiares preocupantes
Durante la investigación preliminar, salieron a la luz detalles inquietantes sobre la dinámica familiar. La víctima reveló que su hermana mayor, actualmente de 18 años, habría pasado por una situación similar cuando tenía 15, involucrando al mismo individuo.
Acciones legales en curso
Las autoridades han emitido una orden de captura contra el presunto agresor, un hombre de 72 años, quien hasta el momento no ha sido localizado. La Fiscalía está llevando a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y determinar el alcance de los delitos cometidos.
El caso ha generado indignación en la comunidad de Yby Pytã y ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar los mecanismos de protección a menores. Organizaciones locales de defensa de los derechos de la infancia han llamado a intensificar las campañas de concientización y a mejorar los sistemas de denuncia y respuesta ante casos de explotación infantil.
Las autoridades instan a la ciudadanía a mantenerse alerta y denunciar cualquier situación sospechosa que pueda poner en riesgo la integridad de niños y adolescentes. El caso sigue abierto y se espera que en los próximos días se produzcan nuevos avances en la investigación.