Julio Jiménez, uno de los pesos pesados en la directiva del club, soltó algunas verdades en su charla con Versus radio, y parece que las cosas no van tan viento en popa como se esperaba.
Primero, lo que muchos temían: parece una utopía pensar que el estadio estará listo para la final de la Copa Sudamericana. Jiménez no se anduvo con rodeos. “Creer que vamos a llegar en condiciones es un poco iluso. No vamos a estar 100% listos, vamos a ir con calma y prudencia,” dijo, y, la verdad, suena a que están más en el aire que otra cosa.
Y sobre cómo van las obras, pues, más de lo mismo. Jiménez admitió que la cosa está más estancada que lancha en lodo. Burocracia, papeleos y más trámites están frenando todo. “En las próximas semanas deberíamos ver algún avance. Hemos estado enredados en la burocracia, pero una obra tan grande como esta necesita ser tratada con cuidado,” reiteró el directivo.
Lo que sí es claro, aunque no nos guste, es que todo va más lento de lo que nos dijeron. Y sí, ya casi podemos decir adiós a la idea de ver la final de la Copa Sudamericana en el nuevo estadio del Club Olimpia.
Ahora, pensando en voz alta, ¿qué tanto de esto será solo retrasos normales y qué tanto será que subestimaron los tiempos? Es conocido que estos proyectos son titánicos y que siempre hay algo que se escapa en la planificación. Pero, ¿estaremos frente a un caso de mala planificación o simplemente es la burocracia haciendo de las suyas?
Lo que es seguro es que los hinchas están esperando más que simples excusas. Olimpia tiene una base de seguidores que no se merece estar en la oscuridad sobre temas tan importantes. Esperemos que los próximos informes traigan mejores noticias y que este estadio no termine siendo otra leyenda urbana.
¿Veremos algún día el nuevo estadio brillando en todo su esplendor? Solo el tiempo lo dirá, pero por ahora, la paciencia parece ser el jugador más importante en este partido.