El dolor de garganta es de esas molestias que aparecen de golpe y te arruinan el día. Arde, pica, molesta al tragar y, en muchos casos, es la primera señal de que algo no anda bien en el cuerpo. En niños y adultos, suele estar asociado a infecciones virales, sobre todo en épocas de frío, cambios de clima o brotes de gripe y resfrío.
Segun expertos consultados por The Washington PostComo pediatra, una de las preguntas que más se escucha en el consultorio es:
“Doctor/a, ¿hay algo natural que le pueda dar para aliviar el dolor?”
La buena noticia es que sí. Existen varios remedios caseros que no solo son populares por tradición, sino que además tienen respaldo científico. Eso sí: no todos son aptos para todas las edades y siempre deben usarse con criterio.
En este artículo te explico cuáles son los 7 remedios caseros más efectivos para aliviar el dolor de garganta, cómo funcionan, cuándo usarlos y en qué casos es mejor consultar al médico.
¿Por qué duele la garganta?
Antes de hablar de soluciones, vale la pena entender el problema.
La mayoría de los dolores de garganta, tanto en niños como en adultos, son causados por virus. Entre los más frecuentes están:
- Virus del resfriado común (rinovirus)
- Influenza (gripe)
- Coronavirus
- Virus respiratorio sincitial (muy común en niños pequeños)
Estos virus ingresan por la nariz o la boca y se adhieren a la mucosa de la garganta, provocando inflamación. El sistema inmunológico responde enviando defensas a la zona, lo que genera enrojecimiento, hinchazón y dolor.
Por eso, al inicio de muchas infecciones respiratorias, el primer síntoma suele ser la garganta irritada, incluso antes de la congestión o la tos.
1- Miel: un clásico que sí sirve (con una advertencia importante
La miel es, sin dudas, uno de los remedios naturales más estudiados y utilizados para aliviar el dolor de garganta. ¿Por qué funciona?
- Tiene propiedades antibacterianas
- Forma una especie de “capa protectora” sobre la mucosa
- Reduce la irritación y la sensación de ardor
- Ayuda a calmar la tos, especialmente la nocturna
Diversos estudios demostraron que la miel puede aliviar síntomas de infecciones respiratorias altas, incluyendo dolor de garganta y tos persistente. Incluso se ha observado su utilidad en el alivio del dolor después de cirugías de amígdalas.
Cómo usarla
- Una cucharadita sola
- Disuelta en agua tibia
- Agregada a una infusión sin cafeína
⚠️ Atención:
La miel NO debe darse a bebés menores de 1 año, ya que existe riesgo de botulismo infantil, una enfermedad poco frecuente pero grave.
2- Tés e infusiones sin cafeína
Tomar algo calentito cuando duele la garganta no es solo una cuestión de costumbre: realmente ayuda.
Eso sí, no cualquier té sirve.
¿Cuáles son los más recomendados?
- Manzanilla
- Jengibre
- Cúrcuma
- Tilas o hierbas suaves
Estas infusiones ayudan a:
- Mantener la garganta hidratada
- Reducir la inflamación
- Generar una sensación calmante inmediata
La cafeína, presente en el té negro o verde fuerte, puede favorecer la deshidratación, lo que empeora el dolor. Por eso, es mejor evitarlos cuando hay molestia en la garganta.
💡 Tip pediátrico:
Agregar un poco de miel potencia el efecto calmante y estimula la producción de saliva, algo clave para aliviar la sequedad.
3- Bebidas calientes y caldos
No todo el mundo es fan del té, y está bien. Otras opciones igual de efectivas son:
- Agua tibia
- Caldos caseros
- Sopas suaves
El calor ayuda a relajar los músculos de la garganta y mejora la circulación local. Además, la hidratación es fundamental: una garganta seca duele más. En niños, los caldos suelen ser una excelente opción porque:
- Son fáciles de tragar
- Aportan líquidos y nutrientes
- Reconfortan y mejoran el apetito
Eso sí, evitá sopas muy condimentadas, picantes o con exceso de sal, ya que pueden irritar aún más.
4- Alimentos fríos: alivio rápido en casos de mucho dolor
Aunque suene contradictorio, el frío también puede ayudar. Helados, paletas de hielo o incluso chupar pequeños cubitos pueden:
- Adormecer las terminaciones nerviosas
- Disminuir la sensación de dolor
- Reducir la inflamación local
Por eso, después de cirugías de amígdalas, es habitual que se recomienden alimentos fríos, especialmente en niños.
Si bien no hay tanta evidencia científica para infecciones virales comunes, muchos pacientes reportan alivio, sobre todo cuando el dolor es intenso.
5- Humidificador o vapor: aliados contra el aire seco
El aire seco, sobre todo en ambientes con aire acondicionado o calefacción, empeora muchísimo el dolor de garganta.
Usar un humidificador de vapor frío puede:
- Mantener la mucosa hidratada
- Reducir la sensación de ardor
- Facilitar la respiración
Importante:
Los humidificadores deben limpiarse correctamente. Si no se mantienen bien, pueden acumular bacterias y moho, lo que termina siendo contraproducente.
Si no tenés humidificador, una alternativa simple es:
- Duchas con vapor
- Inhalar vapor de agua caliente (con cuidado)
6- Pastillas para la garganta (solo en adultos y niños mayores)
Las pastillas o caramelos para chupar no curan la infección, pero sí alivian los síntomas. ¿Cómo ayudan?
- Estimulan la producción de saliva
- Combaten la sequedad
- Algunas generan sensación refrescante (mentol, eucalipto)
⚠️ No se recomiendan en niños menores de 4 años, por riesgo de asfixia.
En adolescentes y adultos, pueden ser un buen complemento, especialmente cuando hay mucha sequedad o necesidad de hablar.
7- Lavados nasales: más útiles de lo que parecen
Aunque parezca raro, la irrigación nasal también puede aliviar el dolor de garganta. Cuando hay congestión, el moco cae hacia la garganta (goteo postnasal), generando irritación constante. Limpiar las fosas nasales ayuda a reducir este problema.
Eso sí, es fundamental usar:
- Agua destilada
- Agua hervida y enfriada
- Soluciones salinas seguras
⚠️ Nunca usar agua directamente del grifo sin hervir.
¿Cuándo hay que consultar al médico?
En la mayoría de los casos, el dolor de garganta mejora solo en pocos días. Sin embargo, es importante buscar atención médica si aparece alguno de estos signos:
- Fiebre alta o persistente
- Dificultad para respirar o tragar
- Dolor muy intenso
- Placas blancas en la garganta
- Amígdalas inflamadas de un solo lado
- Dolor que dura más de una semana
Estos síntomas pueden indicar una infección bacteriana que sí necesita tratamiento específico.
Recomendaciones
Los remedios caseros son una gran ayuda para aliviar el dolor de garganta, pero no reemplazan la consulta médica cuando algo no evoluciona bien.
Respete las edades recomendadas y aseguresé de mantener una buena hidratación. Escuchar al cuerpo —y al cuerpo de los niños— es clave. Y recuerdé: si el dolor persiste, empeora o le genera dudas, consultar a tiempo siempre es la mejor decisión.
Fuente: Infobae
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