Alice Cowdrey, una mujer neozelandesa, pasó un buen susto el martes cuando paseaba con su perra en la playa Tapuae, al sur de Nueva Plymouth. Todo iba bien hasta que el animal empezó a husmear algo en la arena. Alice se acercó para ver qué era, y lo que encontró la dejó helada: un torso sin cabeza que parecía el cuerpo de una mujer.
“Pude ver que definitivamente tenía la forma de un torso, boca abajo, y que era la figura de una mujer. Tenía uñas y los dedos de los pies eran muy realistas, realmente parecía una figura humana”, contó Cowdrey a los medios locales.
Al notar que la figura no tenía cabeza, el terror la invadió y decidió llamar a la Policía. Cuando los agentes llegaron al lugar y dieron vuelta el supuesto cadáver, se dieron cuenta de que en realidad era una muñeca sexual “muy realista”.
A pesar de la confusión, los policías le aseguraron a Alice que había hecho lo correcto al llamarles. “Me sentí un poco incómoda por haber llamado a la Policía por una muñeca sexual, pero ellos me dijeron que actué bien”, dijo ella, aliviada.
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Final con especulaciones y reflexiones
Después, haciendo una rápida búsqueda en línea, se dio cuenta de que una muñeca como esa podía valer miles de dólares, lo que la hizo sospechar que podría haber sido robada. “Nadie la iba a tirar en la playa y dejarla allí”, afirmó.
El incidente dejó a muchos preguntándose cómo una muñeca tan costosa terminó abandonada en una playa. ¿Fue realmente robada y luego descartada? ¿O simplemente alguien decidió deshacerse de ella de una forma bastante inusual?
Mientras tanto, Alice Cowdrey puede ahora reírse de la situación, aunque probablemente se lo pensará dos veces antes de acercarse a cualquier figura extraña en la arena.
A Taranaki woman called police after discovering what she thought was a headless body on a beach, which turned out to be a "very realistic" sex doll. pic.twitter.com/MIK0o9aOiX
— Paul Harvey Predicts 🇳🇿NZ (@HicksKiwi) July 31, 2024
