Ismael Domínguez, el joven que perdió la vida tras una brutal agresión en un encuentro de fútbol, era un estudiante brillante con un futuro prometedor. Anhelaba vestir la camiseta de Cerro Porteño y dedicarse a la protección del medio ambiente. Su padre, inmerso en un profundo dolor, exige que se haga justicia en nombre de su hijo.
Isidro Domínguez, con la voz quebrada por la tristeza, conversó con este medio y pidió que se esclarezcan los hechos que llevaron a la muerte de su hijo Ismael. «Su anhelo era ser futbolista, y de repente, la vida le fue arrebatada de la manera más cruel», expresó con pesar.
El padre relató que Ismael soñaba con jugar en Cerro Porteño y en el prestigioso París Saint-Germain. Pero sus aspiraciones iban más allá del deporte: quería formarse como ecologista y se destacaba por su excelente rendimiento académico. «Era un abanderado, siempre entre los mejores alumnos. Amaba el fútbol y tenía un futuro brillante. ¿Cómo no ilusionarse con él?», manifestó con profundo dolor.
Don Domínguez exige a la Fiscalía y a la Justicia paraguaya que cumplan con su deber y honren los impuestos que paga la ciudadanía. Pide que, a pesar del irreparable dolor, se haga justicia y los responsables de la muerte de su hijo paguen por su crimen.