Ya los médicos habían dado el veredicto: la paciente diabética, cuya herida estaba gangrenada, tendría que perder el pie. Sin embargo, un experimento improvisado en el Hospital de Clínicas evitó el quirófano y dejó a todos asombrados. El arma secreta: ¡larvas de mosca!
Usaron larvas de mosca y lograron salvar el pie
La mujer tenía una herida que requería amputación, pero el equipo médico decidió probar algo radical. Apostaron por un tratamiento que usa larvas de la mosca Lucilia sericata, conocida en Paraguay como mberu hovy, un insecto que se alimenta de tejido muerto.
La terapia con larvas – aplicada en países como Alemania, Francia y el Reino Unido – permite limpiar las heridas con rapidez y eficacia, frenando la infección al eliminar el tejido necrosado. Además, reduce la propagación de bacterias gracias a las sustancias que liberan las larvas.
Liderados por expertos, se animaron a probar una técnica poco común
El equipo, encabezado por los doctores Roberto Corbeta y Jorge Flores, decidió aplicar esta terapia alternativa, marcando un hito en la medicina paraguaya. Los resultados fueron sorprendentes: la herida se limpió y sanó hasta el punto de evitar la amputación.
Este inesperado éxito abre la puerta a una nueva opción de tratamiento para los pacientes que enfrentan complicaciones similares y demuestra que, a veces, la respuesta puede estar en soluciones nada convencionales.
¿Estamos ante el comienzo de una tendencia más amplia en el tratamiento de lesiones graves? Es posible. Lo cierto es que esta innovación ofrece esperanza a futuros pacientes diabéticos que enfrentan situaciones similares. Una muestra más de que en la medicina, las soluciones más simples pueden tener un gran impacto.