Jimena Ríos Sotelo, de tan solo 2 años y 8 meses, falleció el pasado sábado mientras esperaba un donante de corazón. La pequeña llevaba meses conectada a un dispositivo Berlin Heart, también conocido como corazón artificial, en el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
Jimena padecía de una grave miocardiopatía dilatada, una condición que afecta el músculo cardíaco y solo un trasplante podía salvar su vida. A pesar de los esfuerzos médicos y la esperanza de su familia, nunca llegó el donante que tanto necesitaban.
Inicialmente, la niña había comenzado su tratamiento en el Hospital de Itauguá, pero debido a la gravedad de su estado, fue trasladada al hospital especializado hace unos cinco meses. Allí, los médicos le conectaron al Berlin Heart para mantenerla con vida mientras esperaba un corazón compatible. Sin embargo, el sábado, en medio de las celebraciones de fin de año, Jimena no resistió más y falleció.
La situación de Jimena contrasta con el caso de un joven de 21 años que, en vísperas de Navidad, recibió un trasplante de corazón gracias a la movilización de un equipo médico y fuerzas de seguridad que lograron trasladar el órgano desde el sur del país hasta Asunción, en el Hospital San Jorge. Este joven había estado luchando por su vida desde la infancia y finalmente recibió la oportunidad que tanto necesitaba.
En Paraguay, la Ley Anita establece que las personas pueden ser donantes de órganos automáticamente al momento de su fallecimiento, siempre que cumplan con los requisitos médicos. No obstante, la decisión final recae en los familiares, quienes deben autorizar el procedimiento. Ante esta realidad, las autoridades de salud pública insisten en la importancia de crear conciencia sobre la donación de órganos, para que más personas puedan recibir una segunda oportunidad de vida.
Fuente: https://www.ultimahora.com/fallece-jimena-la-nina-de-2-anos-que-esperaba-un-donante-de-corazon