Roberto Giordano, uno de los estilistas más emblemáticos de Argentina, falleció a los 75 años dejando un legado imborrable en el mundo de la moda. Su muerte ocurrió este viernes, según informaron medios argentinos. Sus restos serán cremados este sábado en el Cementerio de La Chacarita, en Buenos Aires.
De acuerdo con el medio Todo Noticias (TN), Giordano estaba internado en el Sanatorio Mater Dei de Buenos Aires, donde no logró superar una intervención quirúrgica relacionada con una afección cardíaca. Su estado de salud ya había sido delicado en los últimos años, especialmente desde que en 2022 fue sometido a una cirugía del corazón que incluyó un cateterismo.
Un ícono de la moda y la televisión
Giordano se convirtió en una figura legendaria en Argentina, no solo por su talento como estilista, sino también por su carisma y frases memorables como el famoso “¡No me peguen, soy Giordano!”, que quedó para siempre en la cultura popular. Durante las décadas de los 90 y principios de los 2000, fue el estilista preferido de las celebridades y organizó desfiles icónicos que combinaban moda, música y glamour. Estos eventos eran espectáculos grandiosos que reunían a las figuras más destacadas del país.
Entre las personalidades que confiaron en su talento están Mirtha Legrand, Valeria Mazza, Pampita, Nicole Neumann y Andrea Frigerio, entre muchas otras. Su cercanía con estrellas del espectáculo lo llevó a participar en programas de televisión junto a figuras como Susana Giménez y Marcelo Tinelli, consolidando su lugar como un ícono mediático.
Problemas legales y últimos años en Uruguay
Aunque Roberto Giordano alcanzó la cumbre del éxito con su cadena de salones de belleza, que incluso llegó a expandirse fuera de Argentina, su vida no estuvo exenta de dificultades. En mayo de 2024, fue condenado a tres años de prisión bajo la modalidad de juicio abreviado por insolvencia fraudulenta, al haber ocultado bienes para evitar ser embargado por la Justicia.
Estas complicaciones legales, sumadas a sus problemas de salud, lo llevaron a buscar una nueva vida en Uruguay, donde pasó sus últimos años lejos del centro de atención que lo había acompañado durante décadas.
Un legado difícil de olvidar
A pesar de los altibajos, Roberto Giordano será recordado como un visionario que marcó un antes y un después en el mundo de la moda argentina. Su creatividad, estilo y capacidad para generar momentos inolvidables lo convirtieron en una figura única que, sin duda, dejó una huella imborrable en el país y en la industria de la moda.