Copiloto de Llano gana más de G. 22 millones en el MDP: La amistad con Blas Llano le valió a Francisco Javier Cáceres un ascenso.
Pasó a ganar un plus
Francisco Javier Cáceres fue copiloto de competiciones de rally del senador Blas Llano y actualmente ejerce el papel de administrador comisionado al Ministerio de la Defensa Pública (MDP), donde goza de libertad para su campaña que apunta a la diputación de Capital por el llanismo.
De acuerdo a las fotografías en la que se ve al lado del automóvil de competición del influyente parlamentario, Cáceres confirma que es de la casta privilegiada de funcionarios llanistas en la institución. Debido a su intención de pugnar por la diputación, el equipo habría maniobrado para el comisionamiento de Diputados al Ministerio de la Defensa Pública.
En la institución a cargo de Lorena Segovia, Cáceres pasó a ganar un plus puesto que se debe sumar a su sueldo de G. 17 millones en Diputados bajo la categoría de asesor, los G. 2.200.000 de bonificación por responsabilidad y otros G. 2.900.000 por Gastos de Representación, que recibe en la Defensoría. También es beneficiario periódico de viáticos cuando realiza viajes institucionales, de acuerdo a las planillas del ente.
Cáceres es pieza clave dentro de la estructura llanista anidada en Defensa Pública, al ser director Administrativo, aunque ostente la profesión de abogado. El aspirante a la Cámara baja por Asunción, bajo el lema Javier nos une, participa activamente de reuniones políticas con funcionarios de la citada institución.
Cáceres es un cuestionado funcionario de la Cámara de Diputados por los aumentos descomunales que logro en poco tiempo.
Prohibición.
Esta actividad política en la última recta de las internas va de contramano con lo que dicta el manual interno del MDP que en su artículo 56 punto 9 prohíbe “participar de cualquier actividad política-partidaria, públicos o privados” a los funcionarios de la citada institución, aunque supuestamente dicha norma no alcanza a los aliados políticos de Lorena Segovia, sí a los demás funcionarios de menor categoría a quiénes sí se les recuerda la vigencia de la ley y la amenaza de amonestaciones y otras sanciones.